La cifra media de bajas laborales por enfermedad se redujo a su tercer nivel más bajo desde 1970. De enero a septiembre de 2009, los trabajadores no realizaron el 3,25% (enero-agosto de 2008: 3,32 %) del trabajo por enfermedad, lo que corresponde a una media de 7,2 días. Los expertos consideran que uno de los factores más importantes de esta evolución es el miedo a perder el empleo. Por otra parte también están cambiando las estructuras laborales. Cada vez menos personas trabajan en la construcción o la industria en condiciones físicamente duras, mientras que crece el empleo en el sector de servicios. Influye positivamente en el índice de absentismo el aumento de trabajo a jornada parcial.
Fuente: Actualidad Exterior. MTIN