El Instituto IHS considera problemático el establecimiento de las seis semanas de vacaciones planteadas por el Ministro de Asuntos Sociales y destaca los costes para la economía. En contra de las seis semanas también se pronuncian la Cámara Económica y la Asociación de Industriales resaltando que Austria se coloca a la cabeza, con 38 días de permiso retribuido por año (vacaciones más días festivos).
Para el Instituto WIFO el aumento de las vacaciones constituye una oportunidad para reducir la jornada de los trabajadores mayores, pues las largas jornadas de trabajo afectan a su salud y muchos de ellos desembocan en la invalidez. Mazal, experto en derecho laboral, opina que el incremento de las vacaciones puede crear empleo siempre y cuando los trabajadores las disfruten de otra manera, en bloques más largos.
La discusión política sobre el aumento de las vacaciones está muy definida: el Partido Socialdemócrata y los Sindicados lo defienden; los empresarios se oponen argumentando que supondría una carga insoportable para muchas empresas y pondría en peligro los puestos de trabajo. El partido FPÖ pide informaciones al Ministro de Asuntos Sociales para tomar una decisión y Los Verdes se inclinan más bien por la reducción de la jornada diaria y semanal.
Fuente: Actualidad Exterior; MEYSS; DP