En 2011 los costes de una hora de trabajo en la industria alemana aumentaron un 3,5% a un promedio de 35,66 euros, incluidos los costes adicionales de personal y las cotizaciones a los seguros sociales. En base al análisis realizado por el Instituto de la economía alemana (IW), cercano a la patronal, Alemania es uno de los países con los costes laborales más elevados, después de Noruega (52,61 euros), Suiza (44,96 euros), Bélgica (40,66 euros) y Dinamarca (37,64 euros). La buena situación coyuntural y la falta de especialistas han conducido a fuertes incrementos salariales. Según los pronósticos del IW esta tendencia continuará y la economía alemana perderá en competitividad. Dentro del país destacan las diferencias salariales entre el este y el oeste: en los länder orientales el coste salarial es, con 22,42 euros, un 40% más bajo que en los occidentales (37,57 euros).
Fuente: Actualidad Exterior; MEYSS