El Gobierno ha propuesto a los interlocutores sociales que la contribución de las empresas para el fondo de despidos sea como máximo, del 1 por ciento del salario de cada trabajador. El dinero va a ser canalizado para productos financieros de riesgo y el trabajador puede optar por el reembolso, incluso cuando el despido sea a petición propia. Los empresarios no están de acuerdo con esta posibilidad y a los sindicatos les parece insuficiente la tasa del 1 por ciento para financiar la mitad de la indemnización por despido. Con esta situación y escasas perspectivas de acuerdo, se reúne el día 12 de septiembre la mesa de concertación social para abordar este asunto. (DN, 8 de septiembre)
Fuente: Actualidad Exterior; MTIN