Un estudio realizado por la Universidad de Bertkeley en California y de escuelas de empresariales de Harvard, publicado en «Science», una de las revistas científicas más importantes del mundo, ha confirmado que la Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo (OSHA) no destruye trabajos, sino que ayuda a que los trabajos no provoquen muertes por accidentes laborales en los trabajadores.
El estudio muestra que la cantidad de reclamaciones por lesiones en el sitio de trabajo se redujo en un 9,4 por ciento en negocios escogidos al azar en los cuatro años posteriores después de que fuesen inspeccionados por la División de Seguridad y Salud de Formación Profesional de California. Y los mismos empleadores se ahorraron un promedio de 26 por ciento en gastos por indemnizaciones laborales, en comparación con empleadores similares que no fueron inspeccionados.
Fuente: Actualidad Exterior; MEYSS