Según un pronóstico presentado por la OCDE, Alemania es el país industrializado que debido a la evolución demográfica de su población a nivel global más perderá importancia económica. Al cabo de los próximos cincuenta años, Alemania se convertirá de la quinta economía más importante en la décima. La OCDE excluye que el retroceso de la población pueda ser compensado por la inmigración. Hasta 2060, la cuota de personas mayores de 65 años se duplicará al 60 %. Como remedio, la OCDE recomienda mejorar la eficaz de la educación, incrementar la productividad y liberalizar los mercados de trabajo y productos.
Fuente: Actualidad Exterior; MEYSS