El controvertido plan podría ponerse en marcha el próximo año y consistiría en recortar las prestaciones contributivas de miles de desempleados a nueve meses en lugar de doce. En la actualidad, los desempleados cobran 188 € a la semana durante doce meses. El Gobierno está siendo presionado por parte de la Troika, UE, FMI y BCE.
Fuente: Actualidad Exterior; MEYSS; The Irish Times.